Semana 12
CC Bund Últimamente leo y oigo mucho que “quienes hoy sufren bullying son los artistas de mañana”, que ese mismo bullying “te hace fuerte” y que, al final, “se logra la revancha”. Dejando a un lado el retrógrado mensaje subyacente, donde el dolor -en el más puro estilo de “la letra con sangre entra”- se presenta como sinónimo de aprendizaje, me pregunto qué pensarán de esta buenista aplicación del cuento del patito feo los miles de niños, niñas y adolescentes que ahora mismo sufren acoso escolar y que no tiene vocación creativa alguna. Los miles de niños, niñas y adolescentes que saben, en carne propia, que no te conviertes en víctima de bullying por ser especial, sino por cuestiones a menudo tan triviales y difíciles de explicar a tu entorno que hasta te llevan a culpabilizarte injustamente por sufrir la violencia ajena. Rasgos físicos, de carácter, anécdotas ocurridas en el aula o cualquier otro detalle pueden ser suficientes para que alguien decida quebrar tu autoestima. Per